Un profesional de los masajes domina su trabajo y por término general ofrece un buen servicio a sus pacientes. Un profesional invidente de los masajes, además, puede captar y encontrar los puntos álgidos donde las tensiones están generando malestar o sufrimiento.
Ponerse en manos de un profesional invidente puede a menudo suponer niveles de empatía y hasta lo que podría denominarse resonancia en la solución de los malestares del paciente. A continuación se enumeran alguno de los beneficios de ponerse en manos de un masajista invidente:
• Reducción del estrés y la ansiedad: El masaje ayuda a disminuir la tensión muscular, la frecuencia cardíaca y la presión arterial, creando una sensación de alivio y profunda calma.
• Atenuación de dolores: El masaje puede aliviar dolores musculares, articulares y de cabeza, mejorando la movilidad y flexibilidad.
• Circulación sanguínea: El masaje aumenta el flujo sanguíneo, lo que a su vez aporta oxígeno y nutrientes a los tejidos, favoreciendo la recuperación muscular y la eliminación de toxinas.
• Sistema inmunológico: El masaje reduce el cortisol, la hormona del estrés, que puede debilitar el sistema inmunológico.
• Calidad del sueño: El masaje ayuda a relajar el cuerpo y la mente, lo que puede mejorar la calidad del sueño.